El tenis como forma y estilo de vida, antes como jugador y ahora como entrenador de jóvenes promesas en la Academia Sánchez-Casal, manteniendo su esencia. Jugador de saque y volea, con raqueta en una mano y libro de lectura en la otra. De nuevo las sensaciones de competición, tras vencer a Sergi Bruguera y Wayne Ferreira en el ATP Champions Tour de Barcelona, mostrarse como la sorpresa de esta prueba y lograr el tercer puesto.
Para el nuevo reto, la participación en el ATP Champions Tour Barcelona, Balcells perdió siete kilos con una dieta estricta, hizo mucho gimnasio y muchos kilómetros en bicicleta de montaña. La preparación tuvo su resultado, dos partidos con sendas victorias y una gran actuación, dando la sorpresa, que le permiten obtener 200 puntos y situarse en novena posición del ranking en el ATP Champions Tour.
El Godó, el ATP Champions Tour Barcelona
Balcells afrontó con ilusión ambos partidos y con las ideas claras, “la mentalidad, el talento y el trabajo son como compañeras de viaje en cada cosa que uno hace en la vida. Con una buena mentalidad, con talento y con trabajo se llega a la oportunidad, a ese momento que uno espera porque al haber dedicado esfuerzo, estas preparado y con confianza”.
“El primer objetivo era competir con garantías, jugar de tú a tú con jugadores que juegan estos torneos habitualmente y que por supuesto han destacado, en su mayoría top ten. Estoy satisfecho por el nivel de juego y porque para vencer a Bruguera como a Ferreira has de mostrar siempre un alto nivel, y además ganar son sensaciones especiales”.
“Para prepararme he hecho dieta, he logrado bajar peso haciendo también mucha bici de montaña y jugando con chicos con los que entreno en la Academia Sánchez-Casal, como ex jugadores como Juan Alberto Viloca, German Puentes”, comenta Balcells.
Balcells asegura que: “Me hace mucha ilusión que me inviten, porque me hace pensar que el hecho de haber sido jugador profesional me siguen teniendo en cuenta y volver a tener el gusanillo de volver a jugar en la pista central y ojalá que sigan contando conmigo”.
Patrón de juego. Saque y Volea
El saque y la volea como armas para un patrón de juego ajustado a su estatura y complexión física, para obtener el máximo rendimiento en la Alta Competición, para medirse en una final en Scottsdale ante Andre Agassi o ganar la Copa Davis en el año 2000 y para tiempo después ser entrenador.
“La gente me recuerda de una forma bonita, con cariño, lo agradezco, y me identifican como un jugador de dobles por el triunfo en Copa Davis. Tenía buen ranking individual y eso, unido a tener un patrón de juego con saque y volea daba garantías para que pudieran contar conmigo para el dobles y el individual si hubiera hecho falta”, afirma Balcells.
“Pero no me sentí solo un doblista o esto que suele decir de especialista en dobles, sino un tenista completo que también logró triunfos en individuales y que tuve un ranking interesante”, añade Joan.
La volea une pasado y presente para quién tiempo atrás fuera alumno, un arte que sigue poniendo en acción cada día para trabajar la movilidad de sus jóvenes promesas, el llamado 3 de 20, dónde hay que tratar de dar 20 golpes con cada pelota.
La figura del entrenador
Para Joan “un buen entrenador te marca y transmite muchas cosas y hay una muy importante qué es cómo jugar los puntos importantes, saber lo que tienes que hacer en esos momentos y la manera de poder hacerlo, sin buscar experimentos ni jugadas diferentes”.
Y añade: “Esa es quizás una de las claves, que tuve siempre a un entrenador como Pato que me guiaba tanto en la manera de jugar, de afrontar el partido, y de todo lo relacionado con lo que pasaba en la pista, teniendo claro en todo momento lo que tenía que hacer en cada fase del partido”.