Marina Ferragut, Anabel Medina, Lola Ochoa, Natalia Gaitán e Isabel García tratan la situación a las que se enfrentan las deportistas en la jornada «Mujer y deporte: El futuro del deporte»
La jornada «Mujer y deporte: el futuro del deporte» se enmarca dentro del II Ciclo de jornadas formativas dentro del marco del ITF 25.000$ BBVA Open Ciudad de Valencia. La ponencia contó con la participación Anabel Medina, capitana de la selección española de la Copa Federación, directora del BBVA Open Ciudad de Valencia con cuatro juegos olímpicos y una plata en dobles en Pekín. Marina Ferragut, olímpica, mundialista y europea con la selección española de baloncesto, en este último la catalana presume de un oro y tres bronces, tmabién jugadora de WNBA con New York Liberty y del Ciudad Ros Casares. También se contó con Lola Ochoa, una referencia española del tenis en silla con presencia en cuatro Juegos Paralímpicos (Río de Janeiro 2016, Londres 2012, Pekín 2008 y Atenas 2004). La futbolista del Valencia Club de Fútbol y capitana de la selección de Colombia, Natalia Gaitán, e Isabel Garcia, diputada delegada de Juventud y Deportes e Igualdad. La jornada estuvo moderada por Raúl Garcia, director de Comunicación de Lourdes Mohedano. Dircom de Grupo Trivium, además de profesor en Máster de la RFEF/FIFA/CIES y en la Universidad Cardenal Herrera CEU.
Las deportistas han hablado de la posición que tienen las mujeres en el deporte en la actualidad. El trato que reciben las jugadoras dista de la relevancia e importancia que se le brinda a los jugadores. Ferragut habló sobre la situación de las mujeres que juegan al baloncesto frente a los hombres: «el baloncesto ahora está en auge, pero ha habido momentos en los que la brecha ha sido muy grande, yo misma le he sufrido«. Por su parte, Anabel Medina señala la relevancia que tuvieron las Olimpiadas de Londres, «la gente comenzó a ser consciente del potencial de las atletas femeninas españolas«.
En esta línea, la diputada Isabel García remarca que la situación que vive el deporte femenino «ocurre también en la sociedad en general«. La diputada señala la preocupación que le genera que desde los organismos e instituciones no sean capaces de reducir esta disparidad.
Lola Ochoa señala de forma optimista que «si estamos hablando de esto es que hay un cambio«.
Las jugadoras también hablan sobre su trayectoria y de la importancia que ha tenido su entorno a la hora de decidirse por esta carrera profesional, así como el apoyo que les ha dado. Medina explicó que el apoyo familiar, los amigos, la propia pareja y la relación con el entrenador son fundamentales para poder superar los retos que se van planteando. Gaitán, aludiendo a su experiencia personal ya que tuvo que marcharse para competir desde muy joven, subraya como le ayudaron a superar este tipo de retos para «poder progresar«.
En esta línea, también se ha tratado el compañerismo en los deportes de equipo donde tanto apoyo se recibe de las compañeras. En los individuales, las tenistas han alabado la relación con sus entrenadores, quienes tras años de camarería y por su papel en el deporte conocen situaciones que pueden escapar al resto de sus seres queridos.
La jornada también incidió en la visibilidad de las deportistas en los medios de comunicación, así como en su patrocinio. En este punto, Ochoa confiesa no ser fan de aparecer en los medios, sin embargo, entiende que es un ejemplo para muchos y acepta esta responsabilidad. Admite, no obstante, que «hay otra parte que no me gusta de los medios: el tratamiento a las personas con discapacidad o, incluso, a las mujeres«.
La capitana de la Copa Federación insisite en el lenguaje, la idea de que «hay que dejar de llamarlo femenino o masculino, es solo deporte«, se han de tratar como iguales, sin destacar a uno frente al otro.
García también remarca sus exigencias en esta área y señala cómo desde la diputación se busca que las inversiones de las empresas sean más paritarias entre deportes y sexos. Además, la baloncestista Marina Ferragut cuenta su experiencia en Estado Unidos donde, si bien las diferentes entre los salarios se continúan dando, los medios de los que disponen las deportistas, el apoyo a nivel de marketing y el volumen de la afición está muy lejos del caso español.