El fotógrafo profesional Alberto Simón, colaborador en la oficina de prensa del Open Castilla y León Villa de El Espinar desde 2012, pudo al fin plasmar su idea de antaño de reunir a destacadas jugadoras participantes en el torneo internacional femenino ante monumentos de Segovia, reconocidos en ámbito mundial.
Ante el objetivo de Simón se situaron la vigente campeona del ITF castellano leonés y número 1 de este año, la española nacida en Nueva York, Paula Badosa (177ª clasificada del mundo antes de llegar a El Espinar), la francesa Tessah Andrianjafitrimo, sexta cabeza de serie del torneo y 332ª del ranking WTA; y la finlandesa Mia Nicole Eklund (542ª del mundo) y la croata Mariana Drazic (812ª), ambas ganadoras de plaza para el cuadro final.

Las cuatro tenistas ejercieron de desenfadas modelos, tras su habitual jornada de entrenamientos o competición, ante tres de los referentes arquitectónicos segovianos que más cautivan: el Acueducto (obra romana del s. II), el Alcázar (como tal desde el siglo XIII con tintes góticos) y el monumento de la Loba capitolina de Roma (que amamantó a Rómulo y Remo), que conmemora el bimilenario del acueducto.
La fase previa y las primeras rondas de la cuarta edición del ITF femenino del Open Castilla y León, que dirige la exolímpica Virginia Ruano, se disputan en las nuevas pistas de la entidad Casino de la Unión de Segovia, que cumple 183 años de historia, en Valverde del Majano (Segovia).
En el torneo internacional femenino de este año participan más de medio centenar de jugadoras procedentes de los siguientes 17 países de 4 continentes: Alemania, Argentina, Australia, Brasil, Bulgaria, Chile, Croacia, Finlandia, Francia, Italia, Japón, Macedonia, Paraguay, Rusia, Serbia, Turquía y España.
