Hace unos días, Anastasija Sevastova no podía imaginar que este sábado disputaría las semifinales del Mallorca Open. La letona, número 82 del mundo, pasó un día en el hospital después de derrotar a la suiza Voegele en su partido de primera ronda (6-0 y 6-2). Mañana, sin embargo, estará buscando una plaza en la gran final. Increíble.
“Después de mi partido estuve en el hospital. Tuve un virus estomacal y después de mi primera ronda me dieron calambres y me deshidraté”, explicó Sevastova tras alcanzar las semifinales en Mallorca. “Vine aquí el domingo ya con problemas. Todo fue bien en mi partido, también después. Todo normal. De repente, empecé a tener calambres, no paraban. Durante 20 minutos estuvo así y el doctor del torneo me dijo que debía pasar la noche en el hospital, así que fui allí”, contó Anastasija Sevastova.
“Al día siguiente me hice análisis y todo estaba en orden”, relató. “No sabia si iba a jugar o no mi segundo partido con Genie Bouchard porque había estado 24 horas en la cama del hospital recuperándome. Pero después del calentamiento vi que me sentía bien así que continué. ¿Qué espero de esta semana? ¡Nada! Estaba en el hospital y ahora estoy en semifinales. A veces, uno no valora lo suficiente lo afortunado que uno es cuando está sano”, recordó la 82 mundial.
Así, mañana Anastasija Sevastova tendrá la oportunidad de alcanzar la final en Mallorca buscando la plaza ante Jelena Jankovic (6-3 y 6-3 a Sorana Cirstea). Un buen reto, aunque ya nada es imposible para ella. “He jugado contra Jelena dos veces. Le gané una y ella a mí otra. Es una gran jugadora, pero voy a intentar seguir adelante”.