Carla Suárez sigue trabajando con ilusión sobre la hierba de Wimbledon. La grancanaria, que debutó venciendo en el All England Club a la antigua No. 4 mundial Samantha Stosur, mantiene el orden de siempre en el tercer Grand Slam de la temporada. Su objetivo será claro: alcanzar la tercera ronda en la capital británica y proteger el resultado cosechado en 2018.
“Fue un debut bastante bueno”, reconoce Carla desde Londres justo después de completar su entrenamiento de la mañana. “Empecé con el primer set a buen nivel, jugando muy a favor. En el segundo set tuve que remontar pero el nivel de tenis para ser una primera ronda de Wimbledon fue bueno. Estoy bastante satisfecha”.
En un torneo que adora y en el que ha mostrado una gran capacidad de adaptación la canaria quiere seguir haciendo bandera de la regularidad. Suárez ha sumado victorias en sus últimos 15 torneos del Grand Slam, la mayor racha de toda su trayectoria profesional, subrayando una virtud total para rendir en los mejores escenarios.
Ahora, y tras dar el primer paso en Wimbledon, Carla queda como única representante española en el cuadro individual femenino. Y su ilusión es seguir avanzando en un cuadro tan exigente como abierto.
“Tengo muchas ganas de jugar el siguiente partido”, señala con ambición. “Juego contra Pauline Parmentier, una francesa a la que conozco mucho. Ella también me conoce. Tiene un estilo bastante similar al de Stosur, mi rival de primera ronda. Creo que eso es positivo pero tengo ganas de descansar hoy, estar físicamente preparada y mentalmente al 100% para la siguiente ronda”.
Carla ha cruzado en dos ocasiones a la segunda semana de Wimbledon, firmando los octavos de final en las ediciones de 2013 y 2016. Este martes quiere quedar a un paso de encontrarse de nuevo en el ecuador del torneo.
El orden de juego y la pista que albergará el partido de segunda ronda ante Pauline Parmentier quedan pendientes de confirmación oficial.