Tenis y Fair Play – Deportividad en el Tenis

Tenis y deportividad

El tenis, deporte número uno en Fair Play

El tenis es, con bastante diferencia, el deporte de elite en el que se respira más deportividad. Hablamos de un deporte en Juez Árbitro Tenisel que el público (en un 99% de los casos) no habla entre punto y punto, desconecta sus móviles y no utiliza las palabrotas habituales en el resto de deportes punteros que se practican en nuestro país.

Los árbitros, personajes criticados, insultados y maldecidos en otras modalidades deportivas, son aquí meros espectadores (en un 99% de los casos), ya que la deportividad de los jugadores del circuito provoca que por ejemplo en los partidos de tierra batida sean los propios protagonistas los que se arbitran sus partidos. El ojo de halcón parece ya mucho más afianzado y sin duda ha ayudado a quitar tensiones en los partidos. Otros deportes deberían también echar mano de las nuevas tecnologías, evitando así que partidos y competiciones se decidan con acciones ilegales que provocan grandes injusticias.

En el primer deporte mundial, el fútbol, podemos ver en cada choque las triquiñuelas que inventan los jugadores, desde tirarse descaradamente en el área, escupirse, insultarse y tratar de engañar en cada jugada al árbitro de turno. En el tenis es habitual ver que jugadores “regalan” los puntos a su rival reconociendo el error del árbitro. Así pues no creo que sea nada positivo que la prensa más sensacionalista de España caliente a nuestros aficionados, haciendo que en el futuro cada participación de Nadal en los torneos franceses (aún debe jugar otra vez este año en París) o los partidos que disputen jugadores de esa nacionalidad en nuestro país, sean una especie de “guerra” entre los dos países vecinos.

Todos tenemos un pasado (incluido el tenis español)

Los medios de comunicación de nuestro país, que esta semana han sacado sus garras contra el público francés, no deben olvidar que situaciones similares a las que ha vivido Nadal también se han podido ver en nuestro país.

Deportividad Tenis y Fair PlayEl trofeo con más tradición que se juega en España, el Conde de Godó, ha vivido situaciones por lo menos parecidas. Hace algo más de una década, en abril de 1998, Gustavo Kuerten era silbado e increpado en cada uno de los puntos que disputó ante Carles Costa, por una situación que se ha vivido meses atrás.

En Brasil, en una eliminatoria de Copa Davis, Kuerten se las tuvo con Corretja y Moya, algo que el experto público de Barcelona no le perdonó, haciendo que el duelo ante Costa sea recordado como uno de los momentos más desagradables vividos en las pistas del Tenis Barcelona. El brasileño, entonces un Top10, perdía contundentemente aquel partido y prometía no volver jamás al torneo.

Tampoco es para sentirse orgulloso del partido que disputaron Tomas Berdych y Fernando González en las semifinales de Madrid de 2006. El checo había tenido un pique importante con Rafa Nadal tras ganarle en cuartos de final, lo que hizo que el público le hiciera la vida imposible en su encuentro ante el chileno González. Pitos, silbidos, mofas…actitudes que a los que amamos este deporte no nos gustan en absoluto.

Cuando el patriotismo se traslada al deporte del tenis se producen situaciones nunca vistas en este deporte individual, donde el público suele ser mucho más entendido que en otras disciplinas. Los silbidos a Roddick en Madrid en una reciente eliminatoria de semifinales de la Davis, algo que también había sucedido en las dos últimas finales disputadas en nuestro país, son algo de los que no debemos sentirnos orgullosos. Aplaudir el error de un primer saque o silbar cuando un rival hace un ace, no son conductas adecuadas para un deporte en el que los padres pueden llevar a sus hijos sin temer por su integridad y por las “feas” palabras que puedan salir desde el graderío.

Precisamente Andy Roddick es uno de los jugadores que podríamos considerar ejemplares por su comportamiento en la pista. Hace unos años se enfrentó en Roma ante Fernando Verdasco, un partido en el que se llevó el primer set y el segundo, según el árbitro, aunque él reconoció que el match ball que ganó era un punto que debía repetirse. Verdasco salvó aquella pelota de partido, se llevó el segundo set y finalmente el partido. Aquella acción del jugador norteamericano, así como sus bonitas palabras sobre Ferrero tras ganarle en la final de Cincinnati en 2006, demuestran que el jugador natural de Nebraska es otro “caballero” de este deporte.

Nuestros jugadores, ejemplo de Fair Play

Deportividad Nadal y Federer, Fair PlayEn el pasado jugadores españoles como Alex Corretja recibieron el galardón a la “Deportividad Stefan Edberg”, en parte por su increíble actitud deportiva en el mítico duelo de cuartos de final del Open USA de 1996. Este premio también lo recibieron en el pasado otros como Alberto Berasategui o Albert Costa. El respeto por los rivales y por este deporte, son aspectos que no se consiguen de la noche a la mañana, y que deben ser trabajados durante toda la carrera de un jugador. Los entrenadores tienen esta responsabilidad y jugadores como Rafa Nadal, al que siempre le han inculcado esta filosofía, son un ejemplo y un espejo donde deberían mirarse los jóvenes, y no me refiero sólo al tenis.

Hace unos años, en el Másters 1000 de Madrid, el veterano Beto Martín mostraba otro ejemplo del “Fair Play” habitual en los jugadores españoles. Fabio Fogini y Beto se enfrentaban en un partido de la previa del torneo y en un cambio de pista el italiano lanzó la raqueta con tan mala suerte que rebotó en su silla y fue hacia la cara de Beto Martín. El árbitro decidía descalificar a Fogini, algo que al final no sucedió por que fue Beto quién le convenció de no hacerlo. Esa generosidad le llevó a la derrota, por 1-6, 6-3 y 7-6 (9) incluso teniendo dos bolas de partido para hacerse con la victoria, un triunfo que le hubiera permitido entrar en el cuadro final de este torneo y asegurarse como mínimo un premio de 9.150 euros y 10 puntos ATP.

FuenteMarc Ramon i Cornet
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